Si buscas una actividad divertida para una tarde lluviosa o un domingo en casa, los juegos de cartas son una estupenda opción para toda la familia. Ideal para compartir tiempo con los abuelos y también con los niños, muchos juegos de cartas son perfectos para toda la familia y fáciles de seguir. Todos os divertiréis mucho, ¡anímate a descubrirlos!
Beneficios de jugar a las cartas
Los juegos de naipes han pasado de generación en generación, sin importar la cantidad de dispositivos electrónicos que la tecnología ofrezca. Un juego de cartas siempre será motivo de emoción y diversión familiar, aparte de todos los beneficios que aporta.
Una de sus ventajas, es que en la mayoría de los juegos solamente requieres las cartas y muchas ganas de pasar un momento muy entretenido, en familia.
Pero, aparte de ser divertidos, los juegos de cartas son muy educativos y ayudan a mejorar los vínculos sociales y familiares.
Ayudará a mejorar la capacidad de atención de tus hijos, pues deberán seguir sencillas instrucciones, así como estimular su pensamiento lógico y memoria.
También aprenderá el respeto por los turnos y manejar la frustración, porque comprenderá que a veces ganamos y otras perdemos, todo de una manera muy sana y positiva.
Juegos de cartas perfectos para los más pequeños
Existe una gran cantidad de juegos de barajas, a continuación encontrarás algunos de los más sencillos, pero muy divertidos, para que toda la familia pueda participar.
La oveja con su pareja
Este es muy sencillo, se puede usar baraja española o de póker. Se utiliza como un juego de memoria. Se colocan todos los naipes en la mesa, boca abajo, y luego, cada jugador debe levantar dos de ellos con la intención de formar parejas en cuanto al valor de las cartas.
Al igual que en memoria, si encuentras dos cartas con el mismo número, vuelves a levantar dos más; en caso contrario, el turno es para el siguiente jugador. Ganará el jugador que más parejas encuentre.
Siete y media
Este juego es recomendable para aquellos peques que ya saben sumar, porque el objetivo es acumular 7 y media con las cartas. Jugamos con la baraja española. Cada carta vale el número que indica, y las figuras medio punto. Se quitan de la baraja los ochos y los nueves.
El adulto reparte una carta a cada jugador. El jugador que empieza mirará su carta y podrá pedir una nueva para tratar de acercarse al valor de siete y medio. Podrá descubrir su carta antes de que le repartan una nueva, u ocultarla. Si la oculta, la nueva carta se pondrá boca arriba, de forma que todos la puedan ver. Si la descubre, la nueva carta se pondrá boca abajo. El jugador podrá pedir más cartas o plantarse si se acerca a las siete y media.
Escoba
Es similar al juego anterior, pero deben sumar 15. El valor de las cartas es su propio número, la sota 8, el caballo 9 y el rey 10.
Cada jugador recibe 3 cartas, y va colocando una de ellas en el centro de la mesa, y el que forme la escoba, agarra el montón.
La escoba se forma al obtener los 15 puntos con las cartas que se colocan en la mesa, por ejemplo uno de los jugadores coloca un rey y el otro un cinco, entonces forma una escoba y coge esas cartas de la mesa. Pero en el siguiente vídeo se explica de una manera más detallada cómo se forman las escobas y cómo organizar el montón para la suma de los puntos en este divertido juego.
Como puedes ver, en este juego no necesariamente gana quien tenga más cartas acumuladas, de hecho, se suma la cantidad de escobas que logró formar cada jugador, cuántos 7 están en su montón y el siete de oros tiene un valor superior a los otros.
Cinquillo
Consiste en formar escaleras con las cartas. Empieza el participante que tiene el 5 de oros, el siguiente jugador debe colocar el 4 o 6 de oros, pero si tiene un 5 de otro palo, puede abrir otra escalera. Para apreciar mejor como se juega el cinquillo, te dejo este vídeo.
Cabe destacar que no es obligatorio colocar una moneda cada vez que un jugador pasa, pero si quieren algún incentivo, puede utilizar golosinas o fichas. Gana quien que se quede sin cartas.
As, dos, tres o Burro
En algunos lugares le dicen el reloj, en otras nervioso y de preferencia se utiliza una baraja española. Uno de los participantes se va a encargar de repartir todas las cartas entre los jugadores. Al igual que en otros juegos, inicia el jugador que se encuentra a la derecha de quien ha repartido.
El primer jugador saca una carta de su montón y la coloca en la mesa de manera que todos la puedan ver, mientras dice as. Luego, el segundo hace lo mismo diciendo dos y el tercero, tres.
Cuando la carta que coloca el participante, coincide con la que pronuncia, todos los jugadores deben colocar la mano sobre la carta y el último que la coloca, es quien pierde, por lo que tendrá que coger todas las cartas de la mesa y unirlos a su montón, como lo puedes ver en este vídeo.
El juego termina cuando un jugador se ha quedado con todas las cartas, y es el burro.
Los juegos de cartas son muy amenos, por eso se han convertido en una magnífica alternativa para jugar en familia. Pero, si conoces algún juego de baraja que los peques se puedan involucrar, no dudes en mencionarlo en los comentarios.